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Month: January, 2017

Darra, el paraíso de las armas ilegales 

Pakistán y Afganistán están económicamente en depresión, con un PIB per cápita que ronda los US $ 3,500 y $ 1,000 respectivamente. Sin embargo, ambas nacio

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Darra, el paraíso de las armas ilegales

Pakistán y Afganistán están económicamente en depresión, con un PIB per cápita que ronda los US $ 3,500 y $ 1,000 respectivamente. Sin embargo, ambas naciones tienen muchos hombres bien armados, al menos en relación con el típico occidente. Con la cartera apretada, poca infraestructura, e incluso la carencia de alfabetización, ¿de dónde proceden las armas?

darra

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La respuesta: un pequeño pueblo llamado Darra Adam Khel.

Situado en Pakistán al sur de Peshawar, cerca de la frontera con Afganistán, Darra Adam Khel (o, simplemente, Darra, para abreviar) es, como el Washington Post lo describió en un titular , “como el Salvaje Oeste, con el plus de Al-Qaeda.

La ciudad es una de la media docena de regiones fronterizas que se consideran “Zonas Tribales de Administración Federal”, o “FATAs” (del ingles Federally Administered Tribal Areas). Estas FATAs están exentas de muchas de las leyes aprobadas por el gobierno paquistaní. En su lugar, Darra es administrado por Regulaciones Criminales Fronterizas, que, a su vez, dan a las tribus individuales de cada área el poder y la responsabilidad de gobernar a su pueblo, y con amplio margen de apreciación. En la práctica, esto significa que la ciudad de Darra se encuentra fuera del ámbito legal de Pakistán – y su gente se aprovecha de esto.

Sólo hay una carretera principal en Darra y se llena, a ambos lados, con tiendas de armas, repuestos y accesorios. Las tiendas venden armas de fuego de todas las marcas y tamaños. Pero estas armas no son importadas por un traficante de armas, tampoco son tomadas de la parte trasera de algún camión de suministro armamentista, mucho menos se adquieren de un pacto conspiratorio firmado con la CIA. Por el contrario, la gente de Darra las fabrica.

Usando sólo “herramientas de mano y un torno pequeño”, los hombres de Darra elaboran réplicas ilegales de armas de fuego durante todo el día, todos los días. Las habilidades de fabricación de las armas de fuego se transmiten de generación en generación, como si fuera una tradición ancestral de comercio. La variedad de armas es prácticamente ilimitada, se extienden desde armas de mano y pistolas de pluma a rifles y lanza granadas. A pesar de la educación no formal y de sus relativas herramientas primitivas, estos armeros puede crear un arma que nunca han visto antes, por lo general en menos de un par de semanas. Y en la mayoría de los casos, las réplicas salen como copias casi perfectas.

El número de personas que viven en Darra es desconocido pero se cree hay alrededor de 50,000 habitantes. Una cantidad absurda de ellos están implicados en el tráfico de armas – Atlas Obscura informa que el 75% de la población masculina trabaja en la “industria”. Aunque, no todos son fabricantes de armas. Algunos son los propios comerciantes, encargados de la intermediación de ofertas y los pagos. Otros actúan como probadores de las armas, sitúan campos de tiro en las zonas de venta de las armas; Y, por último, algunos se encargan de mantener a los turistas fuera de la zona, generalmente los extranjeros no son bienvenidos y se les confisca todo lo comprado por las tribus.

La ciudad se discute a menudo como uno de los lugares más peligrosos del mundo, y, dada su línea de productos la clientela recurrente son los los extremistas alineados con al-Qaeda, los talibanes y grupos similares. Por lo que la descripción parece correcta.

Este documental en ingles, obra de vice, muestra el amplio mercado de armas por aquellos lugares.

http://www.washingtonpost.com/wp-dyn/content/article/2008/03/28/AR2008032802973.html?

http://en.wikipedia.org/wiki/Darra_Adam_Khel

http://atlasobscura.com/place/darra-adam-khel

Hery Emmanuel May 14, 2012

Entretenimiento, Sabias que

Etiquetas: armas, Darra, documental, Ilegales, pakistan, Terroristas, Vice

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Armenia: Genocidio y Diáspora, exposición en Madrid | Periodistas en Español

La exposición ‘Armenia: Genocidio y Diáspora’, quiere “rendir homenaje a un pueblo que sufrió los rigores de la barbarie sin que la historia le haya hecho suficientemente justicia y que nunca deber…

Origen: Armenia: Genocidio y Diáspora, exposición en Madrid | Periodistas en Español

 

La exposición ‘Armenia: Genocidio y Diáspora’, quiere “rendir homenaje a un pueblo que sufrió los rigores de la barbarie sin que la historia le haya hecho suficientemente justicia y que nunca debería volver a repetirse”, señalan los promotores de la muestra, que se ofrece[1] en la facultad de Bellas Artes de la Universidad Complutense de Madrid.

Duduk de Sarkis, de Gustavo Bar Valenzuela
Duduk de Sarkis, de Gustavo Bar Valenzuela

Los artistas participantes son los siguientes: Cielo Donís, México, con ‘El rezo más antiguo’ (temple, 2014); Rufino de Mingo, (Escariche, 1953, España), con una ‘Obra sin título’; Pedro Monserrat, España, con ‘Abandonado’, (óleo-papel, 1996); Gustavo Bar Valenzuela, Israel, con ‘El Duduk de Sarkis’ (óleo sobre tela, 2014); Carmen Pagés, (Madrid, 1941, España), con ‘Tríptico’ (técnica mixta, papel pegado en tabla); Francisco Gómez Jarillo, España, con ‘En su recuerdo’ (marmolina, 2016).

Todos ellos han prestado desinteresadamente sus obras para la muestra, que tienen como comisario a Diego Vadillo López. También hay que mencionar a la editorial Mundibook, de quien partió esta idea, tras editar en 2015 el libro de Francesc Hidalgo ‘Hija de la Diáspora’ en el marco de la conmemoración del Centenario del genocidio armenio.

Pese a las vicisitudes atravesadas hasta la consecución de ‘Armenia: Genocidio y Diáspora’ la facultad de Bellas Artes “se congratula de presentar al fin esta magnífica manifestación artística colectiva, motivada por tan amargo y olvidado suceso”.

En esta muestra han colaborado los citados seis artistas plásticos, de reconocida trayectoria aportando sus respectivas obras, sin otro motivo que la condolencia y solidaridad con una comunidad humana (descendiente de una de las culturas más antiguas del mundo) que en otro tiempo fue objeto de una terrible persecución que buscaba su exterminio, de la que sus supervivientes conseguirían sobreponerse, preservando su idiosincrasia, a base de tesón y espíritu fraternal.

Genocidio armenio[2]

Los historiadores estiman que hasta 1,5 millones de armenios murieron a manos de turcos otomanos, un suceso que muchos académicos consideran como el primer genocidio del siglo XX. Fue hace más de un siglo, en abril de 1915, durante la Primera Guerra Mundial. Las fuentes varían desde 600 000 hasta 1,8 millones de víctimas y dos millones de desplazados, al ser masacrados de hambre y cansancio mientras eran deportadas forzosamente por los turcos otomanos.

El genocidio armenio también llamado holocausto armenio (Մեծ Եղեռն en armenio) es reconocido por 29 países. España no lo reconoce pero sí lo han hecho cinco comunidades autónomas, la primera, el País Vasco en 2007 a los que se sumaron Aragón, Cataluña, Navarra e Islas Baleares y siete ayuntamientos, entre ellos, Málaga, Pinto, Mislata, Burjassot y Benalmádena.

Monumento al genocidio armenio en Mislata.
Monumento al genocidio armenio en Mislata.

Hay dos monumentos en España sobre el genocidio armenio que representan un jachkar (literalmente, cruz-piedra en armenio), uno se ubica desde 2010 en Mislata, provincia de Valencia y el otro, desde octubre de 2016 en Benalmádena, provincia de Málaga.

Se calcula que en España residen algo más de 40 000 armenios, instalados la mayoría en Valencia (14 000), Barcelona (12 000) y Madrid (8000).

Naciones Unidas en 1985 y el Parlamento Europeo en 1987 han hecho expreso reconocimiento del genocidio en sucesivas resoluciones.

  1. Desde el lunes 16 de enero al jueves 2 de febrero de 2017
  2. Informaciones sobre el genocidio armenio en periodistas-es.com

La sátira furiosa de Alexandr Zinoviev | Periodistas en Español

En esta ocasión, la fotografía de portada de El Viejo Topo correspondiente al mes de enero de 2017 recurre a una entrevista de hemeroteca publicada en el número 48 de la revista, fechado en octubre…

Origen: La sátira furiosa de Alexandr Zinoviev | Periodistas en Español

 

En esta ocasión, la fotografía de portada de El Viejo Topo correspondiente al mes de enero de 2017 recurre a una entrevista de hemeroteca publicada en el número 48 de la revista, fechado en octubre de 1980, y que tuvo por protagonista a Alexandr Zinoviev (1922), un reputado disidente soviético que no se dejó engatusar por el capitalismo, a diferencia de otros, y que por eso no aceptaba tal calificación para identificarle.

Portada de El Viejo Topo 348, enero de 2017
Portada de El Viejo Topo 348, enero de 2017

La interviú lleva por título La sátira como lógica enfurecida y fue realizada por María Rupérez y Manuel Pérez Ledesma, coincidiendo con la publicación en España de la novela Cumbres abismales, a la que se le otorgó el Premio Médicis en Francia en 1978, y a la que sigió una especie de segunda parte a modo de ensayo: La caída del imperio del Mal.

Zinoviev se caracteriza por una descripción satírica de la sociedad soviética durante los años del stalinismo y breznevismo, no al estilo de otros disidentes sino con una mezcla de concepciones cristianas, resabios anarquistas y escepticismo, difícilmente asumible a ninguna de las ideologías dominantes en nuestra tradición cultural. Su objetivo fue ese: reflexionar sobre esa sociedad en la medida que la comprendió, para que la gente no se hiciera ninguna clase de ilusiones, según sus propias palabras.

Abre el número 348 de la revista un artículo de Samir Amin sobre la elección de Donald Trump, cuyos primeros pasos están desconcertando según el autor a sus correligionarios, con un margen de maniobra que Amin considera relativamente pequeño para proceder a cambios verdaderamente significativos. Su elección constituye un síntoma evidente de la magnitud de la crisis de la globalización mundial. Juzga el autor que las palabras de Trump sobre la política internacional de su país son ahora mismo contradictorias.

Víctor Ríos firma una interesante entrevista con Pasqualina Curcio, economista venezolana y profesora de la Universidad Simón Bolívar, autora de un reciente libro: La mano visible del mercado. Guerra económica en Venezuela. La charla gira en torno al desabastecimiento programado y entiende Curcio que si se tratara de una crisis económica generalizada, Venezuela no mostraría niveles de producción como los que ha registrado desde 2012. Según esta doctora en Ciencia Política, la inflación en su país ha sido inducida mediante la manipulación del valor de la moneda en los mercados ilegales. Sostiene que grandes empresas alimentarias no colocan sus productos en los anaqueles de los comercios.

Pere Alberó escribe sobre Eugène Green, posiblemente el cineasta más singular de cuantos está en activo en estos inicios del siglo XXI, y el profesor de la Universidad George Washington Christopher Britt, autor del libro Quijotismo y otros ensayos sobre las ideologías nacionales e imperiales en España y Estados Unidos, reivindica el legado del esclarecimiento providencial para salir de una edad oscura.

Dos temas más pueden interesar especialmente al lector de El viejo topo en este mes de enero: el discurso de Fernando Urruticoechea con ocasión de haber recibido el Premi Llibertat d’Expressió en nombre del colectivo de interventores y secretarios municipales defensores de la legalidad, y el artículo de Higinio Polo sobre la fotógrafa alemana Marianne Breslauer.

Urruticoechea nos informa al detalle de la corrupción municipal en España, que afecta según él a todos nuestros centros vitales y a todas las instituciones, y para la que no hay otro remedio que el empoderamiento ciudadano y la aplicación de antídotos sociales. Polo nos habla de la exposición de Breslauer en el Museu Nacional d’Art de Catalunya y de la azarosa y corta vida de la fotógrafa, de la que se muestran alguna obras correspondientes al viaje que hizo en 1933 por el norte de España en un lujoso descapotable.

Todos los caminos conducen a Alepo; por Jon Lee Anderson « Prodavinci

Derechos exclusivos en español para Prodavinci

Origen: Todos los caminos conducen a Alepo; por Jon Lee Anderson « Prodavinci

 

Todos los caminos conducen a Alepo; por Jon Lee Anderson « Prodavinci

EL ARTICULO COMPLETO aquí: http://prodavinci.com/2017/01/06/actualidad/todos-los-caminos-conducen-a-alepo-por-jon-lee-anderson/

Fotografía de Reuters

REUTERS

ARTICULO PUBLICADO EN Texto publicado en The New Yorker. Derechos exclusivos en español para Prodavinci.

Traducción de Mario Trivella Galindo.

POR Jon Lee Anderson 

Qué difícil es ahora volver a conjurar el generalizado optimismo público de la primavera de 2011, cuando Siria estaba envuelta en el apasionado levantamiento que fue proclamado una “Primavera Árabe”, un pico de fervor democrático que barría el Medio Oriente, una fuerza que parecía indetenible y abrumadoramente positiva. Mucho ha cambiado desde entonces. La emocionante “revolución” de la Plaza Tahrir de Egipto se degeneró en violaciones grupales y en la sustitución del presidente Hosni Mubarak por una nueva dictadura militar de culto; la revuelta de Libia llevó al espantoso asesinato de Muammar Qaddafi en Youtube, y dejó tras de sí un país en ruinas; ISIS extendió su alcance a partir de la guerra civil de Siria, para reactivar el conflicto sectario de Irak e iniciar una campaña mundial de terror que continúa actualmente.

Los líderes occidentales que una vez apoyaron y promovieron la Primavera Árabe como un vehículo para el cambio democrático en el Medio Oriente —Nicolás Sarkozy y David Cameron vienen a la mente— están fuera del escenario político o, como Barack Obama, están despidiéndose por última vez. Las reputaciones de estos tres hombres fueron mancilladas de distintas maneras por las decisiones que tomaron en relación al medio Oriente mientras estuvieron en el poder. Obama dio un paso atrás cuando estuvo al borde de una intervención militar luego de que el régimen sirio usara armas químicas contra civiles en 2013 y ahora será sucedido por Donald Trump en la Casa Blanca.

El otro gran tropezón de los gobiernos occidentales fue Libia, que desde el derrocamiento asistido por la OTAN de la dictadura de Qaddafi en 2011, ha estado sumergida en caos. Libia ahora existe en un estado de combate perpetuo entre distintos caudillos de guerra y sus milicias, se ha convertido en un trampolín de ISIS, y ha desestabilizado a gran parte de África del Norte. Adicionalmente, debido a las mafias traficantes que operan ahí con pocos impedimentos, los inmigrantes ahora convergen en Libia para hacer peligrosos cruces en bote hacia Italia. Miles de ellos han muerto.

Gracias, en gran medida, a dichos errores occidentales, el líder ruso Vladimir Putin ha pasado de ser un jugador de poca importancia en las periferias del Medio Oriente a ser el jugador de mayor poder. Cuando aviones de guerra rusos bombardearon hace unas semanas el último hospital funcional de la ciudad entonces controlada por los rebeldes sirios, Alepo, se hizo evidente que el fin se acercaba.

El líder turco Recep Tayyip Erdoğan se ha aprovechado consistentemente del caos de la región para aumentar su propio poder. Mientras tanto, Bashar Al-Assad no sólo se ha mantenido en el poder, sino que no tiene remordimientos. En una declaración que dio para celebrar la toma de Alepo la semana pasada, Assad dijo, “creo que luego de liberar Alepo diremos que no sólo la situación Siria, sino también la situación regional e internacional es diferente.”

En parte debido al conflicto sirio y sus continuas consecuencias, el futuro de la Unión Europea es incierto. Con la llegada masiva de refugiados, ha habido un surgimiento de sentimientos en contra de los inmigrantes en Europa, que se asemeja al movimiento de derecha alternativa americana en su intolerancia y odio sectario, especialmente hacia los musulmanes. Los asesinatos de civiles —en Europa y el resto del mundo (Túnez, Bangladesh, Egipto, Turquía)— por terroristas islámicos se han convertido en un suceso aterradoramente frecuente. A lo largo y ancho de occidente, un sentimiento de xenofobia desagradable se esparce. Hasta ahora, nos ha dado a Brexit y a Trump. En las elecciones francesas que se avecinan, ¿será Marine Le Pen la ganadora? ¿Será el siguiente escándalo terrorista en Alemania el fin de Ángela Merkel y lo que propiciará un ambiente de intolerancia social?

Mientras empieza el nuevo año, muchas preguntas fatídicas cuelgan de un hilo, que de una forma u otra, nos conduce de vuelta a Alepo.